Si en la zona inferior de un muro aparecen, en sentido ascendente, manchas, moho, eflorescencias…. es razonable suponer que se producen por capilaridad. La velocidad de absorción de agua por los capilares es tanto menor cuanto más delgados son estos.
En todos los muros existe una red de poros y capilares. El grado de porosidad de los diferentes materiales se mide por su porosidad abierta, en términos del porcentaje en volumen de los poros accesibles al agua. El agua asciende por capilaridad cuando se conjungan dos factores:
- Existe humedad en el terreno.
- El muro en contacto con el terreno, tiene la necesaria porosidad para que el agua ascienda.
La humedad por capilaridad puede tener causas diversas, que deben ser diagnosticadas correctamente:
- Filtraciones pluviales a través del terreno, que aumentan la humedad de los muros.
- Accidentales, como roturas en conducciones de agua o inundaciones.
- Remonte capilar desde los cimientos, si existe un nivel freático elevado (agua acumulada en contacto con la cimentación) donde acompañan al agua las sales minerales del terreno o disuelven las existentes en el muro.
- Humedad superficial del muro superior a la que le corresponde en equilibrio con la humedad del aire que le rodea.
